En una conversación telefónica sostenida con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, su homólogo de China, Xi Jinping, afirmó que la situación actual en Oriente Medio es muy crítica, lo que demuestra una vez más que el mundo ha entrado en una nueva era de turbulencia y cambio. Según su criterio, si el conflicto se intensifica aún más, no solo las partes en conflicto sufrirán mayores pérdidas, sino que los países de la región también sufrirán graves consecuencias.
Para detenerlo, el presidente chino ha presentado cuatro propuestas.
Primero, es imperativo promover un alto el fuego y detener la guerra. La fuerza no es la vía correcta para resolver las disputas internacionales y solo exacerbará el odio y los conflictos. Las partes en conflicto, especialmente Israel, deben cesar el fuego lo antes posible para evitar que la situación se agrave y evitar resueltamente la propagación de la guerra.
Segundo, garantizar la seguridad de los civiles es de suma importancia. La línea roja de la protección de los civiles en los conflictos militares no debe cruzarse en ningún momento, y el uso indiscriminado de la fuerza es inaceptable. Las partes en conflicto deben acatar estrictamente el derecho internacional, evitar con determinación causar daños a civiles inocentes y facilitar la evacuación de ciudadanos de terceros países.
En tercer lugar, la apertura del diálogo y la negociación es la salida fundamental. La comunicación y el diálogo son el camino correcto para lograr una paz duradera. Debemos adherirnos firmemente a la dirección general de una solución política a la cuestión nuclear iraní y persistir en impulsarla hacia una solución política mediante el diálogo y la negociación.
En cuarto lugar, los esfuerzos de la comunidad internacional para promover la paz son indispensables. Si Oriente Medio es inestable, el mundo no vivirá en paz. El conflicto israelí-iraní ha provocado una repentina escalada de tensiones en Oriente Medio y también ha tenido un grave impacto en la seguridad mundial. La comunidad internacional, especialmente las grandes potencias que tienen una influencia especial en las partes en conflicto, debe esforzarse por promover la calma, y no lo contrario. El Consejo de Seguridad de la ONU debe desempeñar un papel más importante en este sentido.
Xi Jinping enfatizó que China está dispuesta a seguir fortaleciendo la comunicación y la coordinación con todas las partes, aunar esfuerzos, defender la justicia y desempeñar un papel constructivo en el restablecimiento de la paz en Oriente Medio.
«Los dos jefes de Estado valoraron altamente la confianza política mutua y la cooperación estratégica de alto nivel entre China y Rusia, y acordaron mantener estrechos intercambios de alto nivel, impulsar la cooperación en diversos ámbitos y promover el desarrollo profundo de la asociación estratégica integral de cooperación entre China y Rusia», informó la prensa china.
Putin informó sobre su postura respecto a la situación actual en Oriente Medio, afirmando que el ataque de Israel a las instalaciones nucleares de Irán es muy peligroso, que la escalada del conflicto no beneficia a ninguna de las partes y que la cuestión nuclear iraní debe resolverse mediante el diálogo y la consulta ya que ambas partes en el conflicto deben garantizar la seguridad de los ciudadanos de terceros países.
Según los medios de ambos países, «Rusia está dispuesta a mantener una estrecha comunicación con China, realizar esfuerzos conjuntos para calmar la situación y mantener la paz y la estabilidad regionales».